Ximena Rincón: “En Materia de Políticas Medioambientales Aún Estamos en Deuda”

La ex Intendenta de Santiago, actual Presidenta del Centro de Estudios para el Desarrollo (CED) y vicepresidentanacional de la Democracia Cristiana, abrió a SuperMascotas  & Medioambiente las puertas de su casa, para conversar de su amor por los animales, la actual situación medioambiental del país y su aporte para mejorarla deuda que, según ella misma señala, todos los actores del país tenemos con nuestro entorno.

Dos perros malteses nos reciben, moviendo rápidamente su cola, a pesar de que son pasadas las diez de la noche y en Santiago hace un frío con temperaturas históricas. Pasamos a un cómodo living, con algunas esculturas de animales talladas en madera, ya los pocos minutos aparece Ximena con una cálida sonrisa.“Perdonen la demora, estaba con mis niños”, se excusa. Ximena Rincón es de aquellas mujeres que no dudan en demostrarc on una sonrisa lo felices y tranquilas que están en su casa y, en su caso particular, lo satisfecha que está en este nuevo tiempo “de pausa”, como ella misma lo ha bautizado.

¿Cuál fue tu primer contacto con los animales?

Desde niña, con unos gatos que llegaron a nuestra casa y los apadrinamos. Eran ocho, y mi mamá los echaba. Era como una guerra contra los gatos. Pero otro contacto permanente que tuve con los animales fue con los caballos, en el campo de mi abuelita.

¿Y ahora sigues manteniendo esa cercanía con ellos?

Sí, ¡me encantan! Me han gustado desde niña porque siempre los he asociado con mi infancia, con mi hermano mayor y mis primos. Eramos los cuatro que hacíamos paseos en caballo y cada uno tenía el suyo. El mío era El Troyano… El caballo es un animal noble, que te reconoce, leal, entonces se crea un vínculo súper especial y que se mantiene en el tiempo. Ahora tengo una yegua que se llama Bonita, que no es inscrita ni nada por el estilo, pero es mi yegua. Está vieja han pasado los años…como con la dueña….

Se dice que las personas que se relacionan más con mascotas tienen una cierta sensibilidad, que también los compromete con su entorno.

Absolutamente. Creo que la gente que se relaciona con los animales de manera constante crea lazos, y es especial porque le es más fácil o necesita más estar en contacto con la gente y crear comunidad.

Actualmente, por ejemplo, aquí en tu casa tienes perros…Dos perros chiquititos malteses, que tampoco son inscritos, elLucky Strike y Elvis Tec (risas). Así le pusieron mis hijos y son parte de la casa, parte de la familia. Los tengo hace mucho tiempo…uno tiene cinco años, y el otro dos.

Pasando de lleno a tu rol político. ¿Cómo ves las actuales políticas ambientales y de protección animal? ¿Crees que hay mucho que corregir o agregar a eso?

Creo que en materia de medioambiente aún estamos en deuda. Hubo un gran impulso durante el Gobierno del Presidente Aylwin y creo que nos hemos quedado atrás. Es un tema que debemos retomar con fuerza, y que no sólo pasa por crear un Ministerio del Medioambiente sino también por profundizar las políticas que se habían estado desarrollando hace algunos años atrás, y que sean capaces de garantizar el desarrollo económico del país con respeto al medioambiente. Porque no tenemos que olvidar nunca que finalmente el medio en que nos movemos está prestado, que debemos entregárselo a nuestros hijos y nietos, y tenemos que ser tremendamente responsables con él.

¿Y en qué se puede graficar esa deuda? ¿Qué es lo que se te viene a la mente?

Creo que todo, desde las cosas más básicas de compromiso diario con la basura que generamos, por ejemplo, hasta ver cómo aportamos en las políticas energéticas, las políticas de descontaminación, el compromiso con la vida sana, etc. Pero lo importante es partir justamente desde las cosas más cotidianas y básicas.

Señalabas que el Ministerio del Medioambiente no es suficiente…

No, lo que yo digo es que no hay que equivocarse. El Gobierno ha optado por crear un Ministerio del Medioambiente, pero el ministerio en sí mismo no es la respuesta. Podríamos haber seguido con una Comisión Nacional de Medioambiente (CONAMA)y no hubiese sido, a lo mejor, necesario el ministerio, pero lo importante es que lo que hagamos dentro de la institucionalidad tenga sentido.  Y para eso es importante sentar a todos los actores, por cierto al mundo privado, y también al público, en una lógica de desarrollar al país dentro de un esquema de respeto almedioambiente y sustentabilidad económica. Es necesario que el país crezca y se desarrolle económicamente, pero ese desarrollo puede y debe hacerse con una cultura de medioambiente que tenga sentido.

Desde el ámbito público dices que hay deudas  ¿cómo ves al sector privado, entonces?

Creo que el rol del Estado es dictar las políticas públicas y sentar las bases de cómo queremos  desarrollar el país, pero obviamente el empresariado no necesariamente tiene que esperar que el Estado le diga cómo comportarse. Creo en esta asociación público-privado bien entendida que permita que ese desarrollo se haga con respeto al medioambiente. Pero obviamente para eso hay que sentar a todos los actores y establecer cuál es el pacto social que queremos llevar en materia de desarrollo social y crecimiento.

Particularmente desde tu rol político, ¿Cuál crees que puede ser tu aporte en este sentido?

He tenido la oportunidad de estar a la cabeza de la Intendencia de la Región Metropolitana y coordinar al sector público y privado en esta tarea. De hecho me tocaba presidir la Comisión Regional de Medioambiente, y creo que jugamos un rol importante, pese a que un año es muy poco tiempo para impulsar y desarrollar un programa que permita resultados.

Hoy día, desde el Centro de Estudios para el Desarrollo CED, estoy coordinando el trabajo de una comisión que está pensando el desarrollo y el medioambiente. El desafío que nos hemos impuesto es entregar una propuesta a la presidenta del partido, Soledad Alvear, para que sea discutida dentro del V Congreso de la DC.

¿Entonces, se está avanzando de a poco para superar esta deuda de la que hablábamos?

Creo que sí, porque hoy se está discutiendo la institucionalidad. Tenemos el anuncio y creación de este ministerio, que tiene ministra ya, pero lo importante es que haya una conversación sin ningún tipo de prejuicio para que podamos ver qué cosas se han hecho bien y las rescatemos, y sumemos aquellas áreas donde estamos deficitarios.

¿Y cuál crees tú que es la piedra de tope para esto: tiempo, que la gente no tiene conciencia ambiental, que no hay educación desde el colegio para preservar el medioambiente…?

Creo que aquí hay que sumar a todos los actores, y tú apuntas a algo que es fundamental: sin lugar a dudas los agentes más activos son los niños.  Poder meter este tema en la educación, en los colegios, es básico. Por lo tanto habría que invitar al Ministerio de Educación en esta tarea, y a todos los que tienen un rol educativo, a que asuman esto como un gran desafío de país.

Si uno mira lo que ha ocurrido en Europa o Estados Unidos podemos constatar que ellos van de vuelta en este tema, poniendo exigencias a la producción limpia, a qué productos pueden entrar en sus mercados… entonces uno dice bueno, hay estándares que por la vía de los hechos, y la fuerza del desarrollo, hace que tengamos que tener ciertas conductas. Ese es uno de los primeros puntos que, de hecho, se empezó a desarrollar con la Responsabilidad Social Empresarial. Por lo tanto la educación, la participación del empresariado, y el rol del Estado son básicos. E insisto: aquí es fundamental hacer un gran pacto entorno a este tema, que va a permitirnos tener mejores estándares de desarrollo, mejor posicionamiento de nuestros productos a nivel internacional y en definitiva va a beneficiar a todo el país.

Pascua Lama, las catástrofes de Celco…¿qué se puede hacer frente a eso?

Tiene que ver con la Responsabilidad Social Empresarial. Aquí no basta con tener buenos informes de sustentabilidad, sino que tienen que estar acompañado por buenas prácticas. Y sin lugar a dudas Pascua Lama que fue concebido como un tremendo proyecto de desarrollo minero, que fue posibilitado por las confianzas de los países (Chile y Argentina), y que tiene un marco jurídico que se estableció. Obviamente uno espera que ese emprendimiento minero se desarrolle con respeto y consideración al entorno donde está ubicado.

Ahora bien, en este caso no tengo más elementos de juicio que los entregados por la prensa, pero en definitiva, los comportamientos no pueden ser porque alguien te pueda sancionar, sino porque hay una responsabilidad con tu entorno y con las generaciones que vienen.

En el caso de Celco, no es necesario que te sancionen para que enmiendes lo que hiciste o tengas una conducta adecuada. Los hechos señalan que lo que se hizo ahí atentó contra las especies de nuestra fauna, pero también con la comunidad y el entorno. Por tanto creo que Celco tiene que dar las explicaciones del caso y tienen que hacer todo lo posible para que esto no se repita. Lo mismo con ENAP en Talcahuano, una empresa pública que debiera revisar sus estándares de producción, ver qué está pasando, lo primero que uno piensa es que algo no funcionó, algún sistema de control se relajó y falló la operación de la planta. Públicos y privados tienen que cumplir con los estándares, y no es necesario que la autoridad los esté fiscalizando permanentemente para que lo hagan. La conducta de RSE es muy pertinente hoy frente al llamado de Monseñor Goic. El SUELDO ÉTICO es ir más allá de el sueldo mínimo, que es legal, y ello es posible cuando los resultados económicos de la empresa lo permiten y el corazón de el empresario involucrado siente como parte de su retribución a sus trabajadores.

¿En qué estás en este minuto, cuáles son tus proyecciones?

Desde el punto de vista de mi actividad laboral estoy absolutamente privada, en mi oficina, haciendo lo que yo sé hacer: asesorías e informes en derecho en ámbitos que conozco. En política, soy Vicepresidenta de la Democracia Cristiana, acompañando a Soledad Alvear, además y por acuerdo unánime de el Consejo Nacional de la DC, estoy encabezando la comisión que ve el tema municipal en mi partido y que tiene que entregarlas bases para lo que va a ser la negociación, el procedimiento de selección de candidatos, del marketing o campaña electoral propiamente tal y, lo más importante, la propuesta de la Democracia Cristiana en el ámbito de los gobiernos locales .Desde enero estoy presidiendo el Centro de Estudios para el Desarrollo. El CED es una institución que surgió el año 1981, la creó don Gabriel Valdés y fue el primer espacio de encuentro que posibilitó lo que hoy conocemos como Concertación de Partidos por la Democracia. La verdad es que me siento muy honrada de que hayan pensado en mí para presidir el CED, y estamos generando una serie de iniciativas que nos permitan pensar a nuestro país para empezar a proyectarnos a 20, 30 y 40 años más.

¿Sientes que estás en un excelente momento de tu carrera?

Siento que estoy tranquila, que me puedo dar tiempos que antes no me daba, que puedo estar con mis niños, ir a buscarlos al colegio, que puedo arrancarme a comer con mi hija  o con mi marido en la noche… cosas que antes no hacía o que me costaba más hacer Y me gusta sentir que en el ámbito político estoy haciendo cosas que me interesan y apasionan. Por eso estoy muy tranquila, muy contenta, pero también siento que estoy en una pausa. Y esas pausas yo creo que hay que aprovecharlas y gozarlas porque uno no sabe cuánto pueden durar.

Claramente para ti tiene mucha importancia el tiempo que le dedicas a tu familia…

Es fundamental. Mi marido y nuestros seis hijos (tres que tenemos juntos y tres de él), una nieta que viene en camino de Carlitos, la Dominga, que va a ser como mía también… mis papás, mis hermanos, es parte de mi vida y ahora la puedo disfrutar más tranquila. Yo creo que hay que aprovechar este minuto, sobre todo ahora que recién cambié de folio, llegué a los 40, pero estoy feliz…realmente muy, muy contenta.

Ximena, si debes elegir entre perros y caballos, ¿con cuales te quedas?

Con los caballos, aunque no puedo tener uno en la casa porque es más complejo (risas). Sin duda es mi animal favorito. Las cabalgatas por el campo, las caminatas, son especiales. Además te permiten conversar, disfrutar de la naturaleza…

Entonces con la expresión de su respuesta nos damos cuenta que hay en ella un espíritu distinto, uno que mantiene vivo el contacto con la naturaleza, con la nobleza del caballo y que esperamos siempre aflore cuando en su accionar político debe decidir en beneficio de Chile.

Carolina Mosso E.
Periodista

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