Gabriel Coca Mendoza: “Mis Mejores Vacaciones son ir a la Cordillera con mi Perro, Mochilita, Carpa y Olla”.
Escuchar su nombre para muchos suena a selección, para otros, más a televisión. Reciente ganador del Reality 1810 de Canal 13, el Coca de verdad entrega de manera práctica todo su discurso del trabajo en equipo y del esfuerzo personal en las Escuelas de Fútbol de la Municipalidad de Viña, que dirige hace 2 años. El ex seleccionado chileno es el mismo que vimos en pantalla.
Panfletos en mano, cinta adhesiva y corchetera, Gabriel Coca Mendoza, recorre las calles de Reñaca esperanzado. Golpea las puertas de Clínicas Veterinarias, habla con los peatones y automovilistas. No se detiene, pues las horas pasan y su fiel amigo del Reality La Granja no ha regresado a casa.
El tiempo juega en contra, pero, como si se tratara de la prueba más extrema de destreza, Coca, una vez más, está dispuesto a ganarla dándolo todo y esta vez junto al mejor equipo: su familia.
Y aunque para muchos su nombre hoy está unido a las competencias televisivas, su historia está en el fútbol chileno y extranjero donde el éxito no le fue esquivo y tocó techo. Seleccionado nacional, en su equipo del corazón, Colo – Colo, logró la gran hazaña de la Copa Libertadores 1991. Hoy es considerado como uno de los mejores marcadores de punta diestros que han existido en el continente. Sin duda, todo un crack.
Desde su infancia, el contacto con los animales está presente de forma natural en su natal Graneros donde “me crié con mis abuelos y siempre había gallinas, gatos y hartos perros, no de raza, por supuesto, pero siempre hartos animales y había que estar siempre dándoles comida a las gallinas, estar preocupado de los perros. No con los alimentos que hay ahora, había que ir a comprar los huesos de cazuela para cocerlos, hoy hay alimentos hechos”, se ríe.
De familia de campo, el Coca no perdía oportunidad para relacionarse con los caballos, hoy sabe es un afortunado, pues “tengo caballos, perros, de todo, en Graneros, en un campo donde también tengo al Mapu, el caballo que me regalaron en el reality La Granja Vip”, nos cuenta en su casa de Reñaca.
Su gusto por los animales lo captura al punto que de regreso de su carrera internacional en México, no pudo resistirse a traer 2 cachorros labradores, Brutus y Megara, que también residen en el campo de Graneros y dieron vida al cachorro Trazan, que estaba en Viña hasta que llegó la primera estrella del Reality. Las peleas entre los 2 machos “determinó que uno se iba desterrado a Graneros. Y- se ríe mirando a su esposa – partió el regalón de la Doña. Aquí se quedó el de la farándula, el de la tele, ¡¡¡clarooooooo!!!”, todos reímos.
Su relación con él es tan fuerte que cuando el Coca participó en el segundo Reality, 1810, “entró en depresión, no comía, estuvo bastante mal. Después que salí volvimos a correr por la playa de Reñaca y se recuperó rápidamente”.
¿Cómo defines tu relación con los animales?
En Graneros durante el verano agarro el caballo, lo ensillo y nos vamos para el cerro junto con mi perro. Y siempre me he preguntado si los perros tienen una memoria como la de uno (ver artículo Instituto Valle Central, Dr. Alexis, Página XXXX), porque como que se junta con el Mapu y parece que recordaran cosas de la Granja Vip. El Mapu lo huele y el otro empieza a jugar con él, es algo bien especial…
Entonces la entrevista se interrumpe con la entrada relámpago de la Huachy. “Aquí llegó esta otra pesadita y ahí llegó el otro pesado”, refiriéndose a los animales estrellas de los 2 Reality que lo acompañan en, sin duda, nuestra portada más farandulera.Por eso te digo, mis mejores vacaciones son ir a la cordillera con mi perro, mochilita, carpa y olla. Ahí me creo un indio más. Ahí me siento muy identificado con el tema de nuestras raíces indígenas, con nuestra mezcla de 2 sangres y es como que los ancestros de la parte mapuche se vinieran a mí.
¿Recomiendas el contacto temprano con animales?
Creo es super importante el desarrollo de todas las personas unido a los animales. Por lo demás, hay tratamientos para niños con animales: caballos, perros o delfines. Cada familia debería tener una mascota, tener una familiarización con un animal. No por nada en el campo siempre se dice que las malas vibras se las va a llevar el animal.
Yo acerté perfecto con la elección de los perros para criar a mis hijos, los labradores. Mi chico tenía año y medio y estaba metido en su comida, le pescaba la lengua, lo montaba y nunca le hizo nada.
¿Qué podría diferenciar a un hijo tuyo de un niño sin una relación estrecha con la naturaleza?
Creo que el temor a un animal. Me he encontrado con hijos de compañeros que viven en departamentos, al ver a un perro se apegan al lado del papá y reclaman que ‘no, que no se me acerque’. Y una sensibilidad especial que creo aorará en las diferentes etapas de su vida. Mis hijo al jugar con el perro y ver que corre más que él, eso lo motiva.
Hoy en día el cabro chico, en general, está con un computador todo el día o el playstation y cero contacto con la naturaleza, con la tierra, cero actividad física, cero compartir con otros, individualismo total.
¿Qué tal la experiencia en las escuelas de fútbol de Viña del Mar?
Super bien, la tía Coty (Alcaldesa de Viña) ha hecho cosas muy importantes por los niños del pueblo y eso es espectacular, sobre todo en el deporte. Poder hacer esto, además de significar conciencia social, es lo que más me apasiona, porque es entregar lo que hice toda mi vida, el fútbol. Super contento de ser parte del aporte importante que hace la Municipalidad por rescatar a los niños en riesgo social, en todos los cerros de Viña del Mar.
¿Algo que te haya marcado en este accionar?
Uno cree que hay cosas que se superaron y se da cuenta que no es así. Por ejemplo, que llegue un niño turnio con 8 años; ya no hay niños turnios, o que llegue un niño que tiene 7 hermanos y duermen en una pura cama. Entonces uno se va inyectando con situaciones en donde uno puede ayudar.
Con una buena palabra, con un abrazo, con decirles que estuvo bien, para ellos es una motivación especial, porque en las casas vive otra realidad, que su mamá es alcohólica, su papá drogadicto, que está preso. Entonces que llegue una persona, en este caso conocido, un poco más que los demás, y que le diga ven pa’ acá y que lo llame por su nombre y le dé un abrazo, esa cuestión es impagable.
¿En este trabajo tienes algún objetivo especial con algún niño?
Poder sacarlos del ambiente en el que viven y que puedan de 10, por lo menos, uno desarrollarse en lo que elijan. Siempre les digo que ellos pueden ser lo mejor no siendo futbolistas, si no el mejor en la actividad, oficio o profesión que elijan. Y no ser el que está parado en la esquina pensando en delinquir para fumarse los pitos y tomarse el copete.
Y de encontrar alguno que es un diamante en bruto en el fútbol, por supuesto poder llevarlo más allá. De hecho hay varios que están en equipos de los cadetes de Wanderers o Everton, lo que para nosotros es más que un logro superado.
¿Se acabó la tele?
La tele no es algo que me entretenga, es una cuestión de lucas. O sea, yo entré a los dos reality por lucas, no pretendo trabajar en Televisión. Y el último tuvo una importante cuota de revancha, pues de hecho yo estuve mal cuando no gané La Granja Vip, o sea, de hecho, yo me creía ganador y lo perdí.
¿Cómo asumes las críticas de animalistas por algunos pasajes tuyos con los animales en el Reality?
Todos los extremos siempre van a ser malos. La gente que está encargada de la Sociedad Protectora de Animales, debería preocuparse mucho más de otras cosas, que de un programa de TV que intenta mostrar la vida en el campo, donde, habitualmente, se hacen cosas así. O sea, cuando ves una culebra lo primero que haces es matarla. Puede resultar realmente fuerte ver domar a un animal como lo hacen los huasos, el arriero, no como lo hice yo. Son los métodos que se utilizan de generación en generación y si no el hombre de campo no podría montar un caballo.
La diferencia entre las personas y los animales está clara para Gabriel Coca Mendoza, los valora y su real respeto por ellos pudimos palparlo, no sólo por televisión, si no en su hogar, al conocer la relación con sus mascotas que habla de un adecuado equilibrio sin extremos, ése que, muchas veces, hace perder la real diferencia entre el valor de una persona y un animal.
Entonces, volvemos sobre la angustiante búsqueda contra el tiempo que el Coca realizaba en Reñaca para regresar a casa con su famoso perro. Así, cerca de las 19ºº horas cuando la luz se acababa, suena el celular del Coca. Su señora le comunica que debe acercarse al supermercado de Reñaca, alguien parece tener al perro Vip. Éste, increíblemente, tras seguir a unas compañeras de sus hijas, que el día anterior habían ido a casa, se subió con ellas a una micro. El chofer, tras el recorrido completo, finalmente, lo bajó en el mismo punto en que el perro subió a la micro. Todo un crack, toda una SuperMascota.
Rodrigo Rincón
Master of Arts
Ciencias de la información
Universidad de Navarra
director@supermascotas.cl