Tras las últimas terapias en la escuela de equitación Springs Farms, me preparo para acudir al llamado del equipo de la escuela de equinoterapia Still Meadows en Virginia, para evaluar a varios equinos. Ello porque en Springs Farms, una de sus operarias, Sara Kate, también trabaja en la institución para personas con capacidades diferentes y comentó sobre mi trabajo.

Yo disfrutaba de los parajes, luego de las últimas sesiones de acupuntura a los ejemplares, cuando recibo la llamada. Se me hincha el pecho al palpar como en tan poco tiempo en este país, en muchas cosas más avanzado que el nuestro, mi especialización es fuertemente apreciada. De inmediato comienzo a anotar los antecedentes y recopilar la mayor información posible que me permita una anamnesis lo más clara. La noche la dedico a imaginar escenarios y preparar el equipo médico para una primera evaluación de este y
otros pacientes.

Al día siguiente el desayuno sigue haciéndose cada vez más sabroso, como todas las mañanas aquí en Virginia, la experiencia no deja de llenarme de satisfacción e impulsarme a más desafíos a mi regreso a Chile. Los autos nos esperan, camino a ellos la gravilla bajo mis botas, como siempre, vuelve a llenarme de sensaciones, recuerdos que siempre me acercarán al campo, a los caballos.

Ya en ruta repasos los antecedentes sin dejar de disfrutar del paraje. El Estado de Virginia tiene su Capital que es Richmond. Está ubicado en la región sur del país, división Atlántico, limitando al noreste con Virginia Occidental; al noreste, con el río Potomac, que lo separa de Maryland y Washington D.C.; al sur, con Carolina del Norte; al suroeste, con Tennessee; y al oeste, con Kentucky.

La entada de Still Meadows, simplemente es como haber caído a un libro de cuentos, la recepción de su benefactora y su equipo es acogedora, respaldando el importante trabajo que se nos ha encargado. Entonces, sin más, pido me dirijan de inmediato hasta el primer paciente. En el trayecto y con su tutora, Sara, repaso mis anotaciones de la anamnesis y me aseguro no se ha quedado nada en el recuerdo de sus cuidadores, cosa que sí va a ocurrir con esta paciente, no es fácil que se te entregue toda la información. La convivencia con un animal, mayor o menor, es una constante en donde la información es permanente y, muchas veces, podemos obviar situaciones, por no creer son importantes o, simplemente porque entre tantos datos, simplemente, se nos pasa como tutores.

Llegamos a la caballeriza y como ya les relaté en las primeras entregas, la evaluación del paciente se inicia desde el momento que ingresa caminando a la pesebrera.
El primer contacto visual da inicio a ella y continúa una vez que se coloca en un brete o manga de sujeción o quede amarrado a un poste o dos. Jasmine, se ve una yegua tranquila y con buena recepción a ser evaluada y me acerco a ella, como a todo paciente, con afecto y respeto y así seguir con la evaluación de su estado (Ver Nota). Análisis que es visual, al tacto y también instintivo. Así voy siguiendo el recorrido de los meridianos en su hermoso cuerpo y registrando los puntos sensibles a mí acto semiológico de evaluación. Ya teniendo en mi mente el mapa de su estado, posteriormente, tras el análisis y cruce de información, desarrolló un protocolo de tratamiento y comienzo a realizar la terapia de acupuntura con agujas secas.

El diagnóstico a piori es que Jasmine presenta deficiencia a nivel de Bazo-Páncreas-Estómago y deficiencia en Zona Renal. Sólo al día siguiente, Sara, me informa que Jasmine tenía problemas para orinar, anteriores a las dificultades por las que me habían llamado.

Sin embargo, en la tarde, después de la terapia de acupuntura, orinó muchísimo, quedando ella sorprendida, lo mismo los alumnos de Still Meadows. Sin duda, si este dato lo hubiera conocido en la anamnesis, el tratamiento habría incluido un apartado especial, cuyos efectos habrían sido aún más poderosos que los logrados de manera indirecta.

El caso de la yegua Jasmine es digno de destacar en mi estadía en USA, es una clara demostración de los positivos efectos de la medicina holística, de esta milenaria ciencia, ya que, lamentablemente, sólo pude darle una sesión, intensa, pero los resultados, además de positivos, fueron de efectos inmediatos. Así, todo su equipo preparadores y cuidadores quedaron muy sorprendidos y, en lo personal, como siempre, mi satisfacción fue total al ver cómo mejoré su calidad de vida. Es éste mi objetivo principal a la hora de practicar esta medicina milenaria.

Dra. María Isabel Salas
Médico Veterinaria
IVAS Acupunture
Círculo SuperMascotas Chile

Nota:

Mi Evaluación del Paciente:
Observo sus ojos, lengua, orejas, cola, pelaje. Tomo su pulso y voy tocando su cuerpo en diferentes zonas llamadas puntos back shu y puntos mu, donde podré sentir puntos dolorosos de diagnóstico, ya sean puntos síndromes agudos o crónicos, según corresponda. Los marco en el cuerpo del paciente y posteriormente determino el protocolo a seguir. Ya sea con aguja seca, con moxa, con láser puntura, etc.