Inédito, en nuestros 12 años de Ediciones nuestra Portada va al trabajo con su Mascota. Canales de televisión, radios y productoras saben de esta especial relación. Te la narraremos desde el mismo camarín, momentos antes de salir al aire el Programa Primer Plano de Chilevisión.Tranquila, cariñosa y muy obediente, así es Blanquita, la hembra que se robó el corazón de Julio César Rodríguez. Pese a haber sido abandonada y muy arisca, hoy no puede vivir sin el reconocido Periodista al que le disputa la cama y lo espera en sus lugares de trabajo hasta que termine sus largas jornadas. En esta entrevista nuestra Periodista, Andrea Donoso, logrará llegar a un interesante ejemplo que cuestiona la aplicación del concepto Tenencia Responsable. Como todo en la vida, nada es tan negro ni tan claro.

Plató, luces, Técnicos Audiovisuales de un extremo al otro, la acción no se detiene en Chilevisión. El carismático Julio César Rodríguez nos recibe en su camarín y Blanquita mira a la cámara de manera natural. No corre ni se aleja de su amo. Ella sigue las instrucciones al pie de la letra. Pareciera que los sets de televisión no la intimidaran, ni las luces, ni los extraños. Ella se siente bien, se siente segura y eso, entenderemos, tiene sólo una razón: Julio César.

Es que donde él esté, ella va. Así, esta entrevista se realiza un día viernes, minutos antes de que comience en directo el programa Primer Plano. Ha llegado a tal su cercanía que, cómo confiesa Julio, él y Blanquita se han mimetizado. “Ella es cariñosa, amorosa. Al igual que a mí le importan más las cosas emocionales que materiales. La Blanca cuando yo no estoy ni come, aunque sea algo rico. No la podemos engañar si sabe que yo voy a salir. Le gusta estar todo el día con gente como a mí, que soy malo para estar solo, por eso la traigo.

Por ejemplo, a veces voy al supermercado y la llevo. Ella prefiere estar 10 ó 15 minutos sola en el auto, que esperarme dos horas en la casa sola, porque se desespera”.

Blanquita llegó hace poco más de un año y medio a la puerta del hogar que, por ese entonces, compartía Julio con la modelo Laura Prieto. Después de cuatro días en su puerta y asegurarse que no tenía dueño, decidieron hacerse cargo de ella mientras le buscaban una familia. “En ese tiempo teníamos tres perros, dos Pug y uno recogido en Los Andes que se llamaba Forest. A principio estaba enferma y era súper, súper mañosa, porque al parecer la habían golpeado mucho. Pero cuando se mejoró se volvió regalona y mostró su faceta cariñosa. Después yo me separé de Laura y ahí con Blanca hicimos súper buenas migas y era con la perra que mejor me llevaba. Laura se llevó tres perros y me dejó a la Blanca. Ella me dijo que Blanca iba a ser mi gran compañera, ella te quiere más a ti que a nosotros, es tu perra”, cuenta el Periodista.

Y estaba en lo cierto. Desde entonces ambos se tienen el uno al otro. Por ello, Julio César Rodríguez la ha llevado a todos los lugares donde trabaja, a Radio Bío Bío donde conduce el programa Podría Ser Peor, a Chilevisión y al canal Vive! donde anima el late show, Síganme los Buenos. “Una vez la dejé en la casa y grabé con mi celular lo qué hacía. Se pone en la puerta, no sale de ahí, rasguña, llora, por ello prefiero traerla y que me espere aquí. Ella prefiere estar conmigo permanentemente a estar sola. Además me da mucho miedo, porque también arranca, como vivimos en Lo Curro…Ella es súper ágil, corre súper rápido, en forma de zig – zag, le saca fácil cuatro vueltas a otros perros (acá su voz revela orgullo que no puede disimular), pero me da miedo que suba al cerro y le pase lo que vivió Forest y por eso también la ando trayendo”, explica.

¿Qué significa hoy Blanquita en tu vida?

Blanca es mi compañera, ella es mi amiga. Después de niño, nunca tuve una mascota, porque siempre he sido una persona que ha trabajado mucho y que ha vivido solo, por lo que no tenía mascota y además, solo me gustan los perros. Con Laura teníamos tres perros y mi regalón era Forest, que era increíble, pero en los cerros de Lo Curro lo atacaron unos perros y lo mataron. Fue una experiencia súper fuerte. Yo lo recogí, lo cosí, lo lavamos y lo enterramos junto con nuestros hijos. Fue la primera pérdida importante para ellos. Ella llegó justo dos meses antes que mataran a Forest, entonces la pérdida si bien fue grande, estaba Blanca y desde que me separé, nos hemos vuelto inseparables. Vamos a la radio juntos, viene conmigo a Primer Plano, a la Hermandad. Es tan inteligente que cuando yo estoy con ropa informal, ella sale conmigo, corre, pero ve que me pongo corbata, ella se echa, sabe que tiene que quedarse aquí esperando. A veces los chiquillos le traen comida del casino, arroz con pollito, agua y espera.

De Mono y Juno a Blanquita: Un par de décadas

Aunque con Laura Prieto tuvieron cuatro perros en común, incluida Blanquita, Julio reconoce que la última vez que tuvo una mascota, que sintió como propia, fue en su infancia. En ese entonces cuidó de Mono, un Bóxer y Juno, un Collie. “Después hubo otras Mascotas en la casa, pero eran más de mi mamá. Desde entonces no tuve más, ni siquiera pulgas”, dice riendo. Pero Blanquita dio vuelta esa historia y hoy no descarta que ella tenga descendencia. “Ella no está operada, tuvo su último celo hace poquito y no he querido operarla, porque me gusta la cosa más silvestre, pero tengo tiempo para tomar la decisión. De repente siento que me gustaría que tuviera perritos para que tuviera descendencia, porque siento que será buena mamá, es entretenida, pero ¿con quién la cruzo? si esta raza no existe”, dice.

Si te digo Tenencia Responsable ¿qué me respondes tú?

Creo que la Tenencia Responsable se tiene que ajustar a cada familia. Lo importante es cuidar a los animales. Los perros que son queridos se nota altiro. Creo que cada uno se adapta al otro. Yo, una vez tuve que dejar a la Blanca en el auto, por unos 15 minutos, para formar un papel en una notaría. Cuando regresé había un tipo y me dijo que cómo se me ocurría dejar a mi perro en el auto. Me pude haber ido, pero le dije que qué sabía él de mi perro. Abrí la puerta del auto, salió la Blanca y me abrazó. El tipo me dijo que se notaba que me quería. Yo le dije que sí y que prefería que me esperara 15 minutos en el auto a que estuviera seis horas sola en la casa.

Igualmente con la Ley Cholito eso puede considerarse abandono o maltrato animal.

Hay que trabajar ese tema y creo que el abandono tiene que ver con varios factores: con perros que nacen en la calle, que se procrean, gente que no quería tener perros chicos y cuando éstos nacen, se deshacen de ellos, etc. No creo que todos los perros que anden en la calle sean de gente que los botó. Uno tiene que tener un perro en la medida que lo tiene bien y cuando uno ya no puede tenerlo, no botarlo, sino que regalarlo. Además, en ese contexto, hay gente que no tiene paciencia. Por donde yo vivo van a dejar a muchos perros. Nosotros con mi hija chica, Julieta, hemos recogido alrededor de seis perros en los últimos tres meses. Los tenemos dos días y a través de Instagram los regalamos.

A Blanca yo la llevo al Médico Veterinario y tiene todas sus vacunas. Incluso le he preguntado al Veterinario si puede comer comida, porque a ella le encanta el arroz con atún o con pescado.

Ella va a la peluquería y llega muy blanca, con aros, brillitos y pinche, lo que le dura tres a cuatro días. No usa ropa porque le da alergia. Ella es una perra silvestre, no le gustan los moños ni la ropa, el collar de hecho se lo puse, porque veníamos para acá, pero no usamos correa, ni siquiera en la calle, en la playa, en el auto o en la plaza, pero cuando se me arrancó, al collar le puse el teléfono”.

Una chica bien portada y muy bien cuidada.

Sí, yo la llevo a la radio con el peligro de que esté entrevistando a un ministro y se pegue un ladrido, pero se porta bien. Ahora nuestra lucha la tenemos en la noche, porque estoy intentando que ella duerma en su cama que está al lado de la mía. Ella no duerme abajo (primer piso) porque si no llora, rasguña la puerta. Cuando nos quedamos solos, no quería que se sintiera sola, entonces la dejé entrar a la pieza, pero le hice una cama abajo, pero cuando despierto, tipo dos de la mañana, siempre siento que alguien me está haciendo cucharita y es ella, entonces le digo, “Blanca a tu cama”, ella reacciona de mala gana y se baja, pero si me vuelvo a dormir, ella se vuelve a subir, sin que yo me dé cuenta porque no salta. Todos los días hace show para bajarse, ya sea con miradas, de reojo o pone una pata en el aire para que uno le diga que no se baje.

Ahora que son inseparables, ¿qué haces o harás cuando debas viajar?

Ella va conmigo a mi casa de Maitencillo y ahí ella es feliz, corre en la playa, es su casa. Cuando viajo hay muchas personas que la quieren tener. Viajo poco, porque hago franjeados, por lo que si no estoy es por poco tiempo y ¡te mueres como la quieren cuidar! Tiene como 20 casas donde puede quedarse.

Entonces, ya es hora de salir Al Aire. Julio se desconecta de su chochería por su fiel Mascota Blanquita y como si apretara un automático entra en modo conductor del programa Primer Plano. Entre tanto y tal como él nos contó, Blanquita se queda tranquila en el camarín, esperando que su amo termine de trabajar. Ni un sólo ladrido, sólo una mirada cómplice entre ambos como diciéndose: “ya nos vemos”. “Te espero”.

Andrea Donoso
SMA / Prensa
Periodista
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